Son las 11 30
Son las 11 30 y mi amiga Andrómeda acaba de partir. Esta noche a la plática se sumó un ruido de fondo infernal. A eso de las 8 de la noche comenzó la bulla, una sarabanda evangélica estridente y desentonada, como suelen ser. Creí que duraría poco y no podía identificar de dónde exactamente venía, el lugar en el que vivo es un canal de sonido. Un par de horas después, luego de que una mujer llevaba ya casi una hora cantando lastimeramente y dando de aleluyas y gritos, con un tono muy a lo Chabela Vargas, Andrómeda propuso salir a buscar el sonido y echar un ojo, así que salimos y zaz, era en la esquina, donde hay un colegito. Nos acercamos y pudimos ver a la viejtia en plena acción. El movimiento que hacía con su cuerpo y con un puño en alto, se asemeja mucho al clásico movimiento rockero de los adolescentes, así de atrás hacia adelante, en un mismo punto, y moviendo el puñito levantado al mismo ritmo que el resto del tieso cuerpo. Así, justo así se movía la viejita, que seguriría cantando por una hora más. Dimos la vuelta, pero han puesto láminas que tapan el patio del colegito, así que imposible ver más que por la puerta de entrada por la que habíamos visto a la doñita. Pasamos de regreso y vimos una banda de chavos tocando la sarabanda, vestidos todos con trajes negros y camisas vino tinto. Se notaba que tenían ganas de echar el pasito de baile, pero para este tipo de denomiación religiosa, el baile es una expresión del maligno, del diablo, del enemigo, que le dicen. Los feligreses, estaban todos parados frente a sus sillas, y aunque también se percibían las ganas de algunos de bailar, solamente aplaudían al ritmo sarabandesco desafinado de la viejita y compañía. Montados sobre la acera, un montón de picops y una caminonetilla desde la cual, nos tiraron un beso. Regresamos y pasó una hora y pico más, mi amiga se fue en uno de los esporádicos silencios. A todo esto, la señora había parado de cantar, un hombre predicaba, luego cantó también desafinado, y a cada rato se escuchaba (de lo poco que se entiende) "el enemigo", "el enemigo" y "el espíritu santo". Luego el silencio -que según nosotras marcaría el fin de la velada evangélica- y mi cuata aprovechó para partir. Son más de las 11 30 y en los 20 minutos que han pasado desde que Andrómeda se marchó, ha cantado un niño, desafinado como el sólo, dio una mini puteada sin mircófono un tipo y ahora, otros dos gritan y predican.
El patio de la escuelita estaba adornado con globos, espero que eso señal de que sólo celebraban una boda o unos desafortunados 15 años, sin reggaeton-ton.
El patio de la escuelita estaba adornado con globos, espero que eso señal de que sólo celebraban una boda o unos desafortunados 15 años, sin reggaeton-ton.
Comentarios
Que tal te han tratado los 34's?
Abrazo.
Mirá vos, esto que pasó el sábado fue bien bizzaro pues era uno de esos ritos que na´mas piensa uno que pasan en los pueblos, una cosa bien extraña, yo le decía a Andrómeda que se me hacía como una traslación - adaptación del rollo gospel de los EUA, y me imaginaba a una negrota cantando y diciendo aleluya en lugar de la viejita... era poco lo que se entendía vos, pero el enemigo estaba en boca del pastor a cada rato... y sí hay de sermones a sermones pero este sí tenía un tono amenazador.
ABrazos vos
Andromeda es tu alter ego? hmmm
abrazos