Renacer


Desde hace algunos días hay una campaña agresiva y masiva del canal 27 que anda por allí matando arbolitos para hacer postales y promocionar el renacimiento personal, supuestamente respaldado por palabras del colocho. Solamente de donde inicia la avenida que lleva para mi casa hasta donde se dobla para entrar, hay cinco vallas de esas que cuestan un chingazal de plata y que contaminan la vista en las que se recuerda a la gente que les es necesario nacer de nuevo. Pero ¿de qué tipo de renacimiento habla esta gente? Pos del renacimiento comprado con diezmos, semillas y promesas de portarme bien a cambio de mujer, marido, casa, comida, plata para pagar la tarjeta de crédito, paz, seguridad, protección ante la delincuencia que nos aplasta y encarcela día tras día.

Fui criada en la fe católica, con sus rezos a las ánimas benditas y con oraciones que tenían como único objetivo encontrar la paz interna, jamás se me habló de que a cambio de plata, velas y demás podría obtener cositas, circunstancias favorables, una buena nota en clases, ni nada por el estilo. Claro, no niego que toda buena persona católica, especialmente en la adolescencia y cuando el cuerpo no me daba más para estudiar, o se me había olvidado hacer la tarea, pidera porfa colocho que suspendan las clases, pero desde ese tiempo ya sabía que eran patadas de ahogado, que jamás dios, la virgen santísima o el colocho mismo me harían un favor. ¿Por qué? pos porque desde chica se me dijo que dios, el magnifico, le master me había concedido el libre albedrío, lo que significaba que algunas cosas, las más relacionadas a mi vida personal, eran consecuencia de mis actos, decisiones, experimentaciones y demás. Mi libre albedrío, al igual que el de todas las personas, está determinado por las condiciones sociales, políticas, económicas, culturales y demás que configuran el espacio en el que he nacido, es decir este paisito de mierda como cariñosamente se le llama a Guate desde que Zepeda lo bautizó. Paisito de mierda en el que nada funciona, en el que gobierno tras gobierno se institucionaliza la impunidad, en el que las oportunidades de desarrollarse plenamente se ven plenamente recortadas. Guatemañas, el país en el que solamente queda encomendarse a dios y asegurar las ilusiones (la vida, la tranquilidad, la armonía, etc.) a través de cuotas mensuales a tarjetas de crédito y a pastores que hablan de renacimiento mientras se bañan en guaro y andan en autos último modelo.

Mi fe católica, al menos la fe en la institución católica, se rompió cuando me enteré -por allí de los nueve años- de la existencia del tesoro del vaticano. Pensar en oro, plata, marfiles, piedras preciosas y demás cosita codiciadas por la gente y su ego, me dio asco, un asco profundo que sigo sintiendo por todos los que lucran con la fe, cuando más de la mitad del mundo no tiene acceso a comida, educación, salud. A los nueve años, le preguntaba a mi madre por qué se guardaban los curitas esos dineros en lugar de ayudar a solucionar las condiciones de pobreza de las personas. Por suerte mi madre no me crió en una burbuja y me hablaba del egoísmo, de que la iglesia tenía como objetivo principal la acumulación de riquezas y jugar con el temor a la muerte y al dolor, miedos que desde que a alguien se le ocurrió decir que tenía contacto con las divinidades, fueron utilizados para exprimirle los bienes a la mara, decirles que la eternidad, la seguridad y el perdón están en el arrepentimiento, en el "renacer".

Mi problema principal con las iglesias de cualquier denominación, se basa en la irresponsabilidad de estas instituciones ante la realidad. Veamos un ejemplo: en el nuevo chance he tenido la oportunidad de conversar con promotoras de salud sexual y reproductiva que trabajan en áreas invadidas por iglesias. Ellas me contaban hace un par de semanas que en las colonias que atienden -repartiendo condones, píldoras e información sobre salud- se han infiltrado en los puestos de salud estudiantes de la UNIS-la u del opus dei- que les hablan a las mujeres del método natural y del pecado condonil, lo que se ve aumentado por las iglesias evangélicas que también les dicen que no se protejan, que sigan dándole con sus maridos sin condón y que tengan los hijos que dios, el señor, les envíe. Esto es grave para un país en el que la epidemia del VIH aumenta día tras día, y en el que de cada 3 portadores, 2 son mujeres. Esto es grave ante una humanidad que no puede pasar del sexo -por reproducción y/o por placer-, grave en una sociedad en la que el "ser hombre" está ligado al ejercicio de la práctica sexual -con el consentimiento o no del otro-. ¿Es realmente papel de la iglesia meterse en la vida sexual de las personas? ¿es realmente su papel limitar el libre albedrío de la gente? ¿si dios existe, intervenir con el albedrío -su mayor regalo- no es un pecado? ¿no sería mejor que las iglesias educaran a la mara para que la mara pueda elegir libremente? y no hablo solamente de educación en el plano sexual, sino en todos los planos ¿no sería mejor que en lugar de estar construyendo complejos religiosos, ciudades religiosas, la iglesia invirtiera en que la mara conozca sus derechos y obligaciones, para que pudiera ejercer plenamente su libre albedrío? Pero cada vez que pienso esto, escucho la risa de mi madre, la risa que le daba mi socialista interna, la risa que le daba mi esporádica ingenuidad social y puedo imaginarla diciéndome que si eso pasara, la iglesia dejaría de ser lo que es, perdería su objetivo principal: jugar con los temores de la mara, la mara se educaría y dejaría de tener miedo, miedo a reclamar su básico derecho de ser humano y no un animal pensante temeroso de su entorno, de sus semejantes y de sí mismo.


Hace un par de años tuve un profe -ex cura- que decía que cristo hablaba con ironía, que quizá la manera más efectiva y profunda de conocer el nuevo testamento, sería pensando que comentarios como el de la necesidad nacer de nuevo, solamente podrían ser comprendidos como sarcasmo y en este tono, pienso que a toda esa mara que le saca dinero a la gente a cambio de indultos y favores divinos, les hace falta renacer: morir y que su energía desperdigada por el universo, se convierta en una forma de vida nueva.

Comentarios

Rodolfo Peña ha dicho que…
Si, el famoso anuncio, que como por arte de magia financiera y publicitaria esta casi que hasta en el papel higienico. Con mi novia estabamos hablando que seria muy bueno hacer una contra campaña con el mismo diseño pero con algunos pequeños cambios:

1 en lugar de nacer seria coger.
2 en lugar de Juan 3;3-8 seria
Juan 6;6-6.
Y si queres agregale lo que a tu cinica mente se le ocurra.

Es mas para hacer modificaciones en photshop estoy y mas si es para chingar jejeje
Denise Phé-Funchal ha dicho que…
jaja, pos lo que se me ocurre es dejarle el nombre del colocho y abajo poner... Usted, ¿ya cogió de nuevo y con protección? Canal Venus o 69
Ricardo Hernández Pereira ha dicho que…
Interesante: Rodolfo propone colocar en el nuevo diseño Juan 6;6-6, y cito a continuación:
"Mas esto le decía a Felipe para probarle, porque él sabía lo que había que hacer".
Ya ven ahí está el libre albedrío ¿o será la ironía de la que estaba hablando tu profe?
Un abrazo.
Denise Phé-Funchal ha dicho que…
pos si hombre, si a la humanidad hay que tenerle fe, no putearla ni decirle lo que hay que hacer... saludos vos
Fernando ha dicho que…
Te invito a que recuperes la fe, no se si en la Iglesia, pero si en los sacramentos.

Yo como miembro de la Hermandad Internacional de las ánimas del Purgatorio (www.tenesperanza.org), jamas he pedido un céntimo (y eso que algo nos gastamos en folletos). A las ánimas se las ayuda con oraciones, acciones e indulgencias plenarias, ¿de que les serivirian a ellas unos centavos?
Denise Phé-Funchal ha dicho que…
Gracias Fernando por tu comentario, estoy de acuerdo con vos, la fe no necesita dinero...saludos.

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