Ciencia II
Estudios posteriores del Doctor Krowski sobre las aves de rapiña, refieren que en caso de que éstas vuelvan -vivas o bajo la forma de espectros-, la única manera de alejarlas es preguntar su nombre de pila -pregunta a la cual tienen prohibido no responder- y hablarles claramente pronunciando siempre al final éste nombre. El proceso no toma más de cuatro frases, la cabeza les duele y, finalmente, el corazón explota.
Comentarios